El pasado 11 de diciembre, una decisión envuelta en controversia sacudió los cimientos de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). El Consejo Universitario nombró a Russell René Arcila Novelo como nuevo director de la prestigiosa Facultad de Medicina para el periodo 2026-2030. Sin embargo, este nombramiento, que formalmente se enmarca en un proceso académico, ha desatado una ola de críticas internas y en redes sociales, poniendo en tela de juicio el rigor académico y la integridad del liderazgo universitario. La gran pregunta que resuena es: ¿Se priorizó la excelencia o el pago de “favores políticos”?
Un Historial Cuestionable y una Visión “Anticiencia”
Arcila Novelo, médico rehabilitador de formación, arrastra un historial que dista del liderazgo académico deseable, según múltiples testimonios internos. Las acusaciones son graves y apuntan a una conducta que choca frontalmente con los principios de la docencia y la ciencia.
• Denigración Académica: Ha sido señalado por menosprecio hacia su propia licenciatura, la de Rehabilitación. Fuentes indican que utilizaba sus clases para denigrar a los estudiantes y la carrera, afirmando que “no debería de existir” y que sus egresados difícilmente serían contratados.
• Aislamiento y Bajo Desempeño Docente: Su interacción con sus pares académicos es mínima, bajo la supuesta premisa de no considerarlos de su nivel. Esto se refleja en evaluaciones docentes consistentemente “pésimas” por parte de su alumnado.
• Postura Anticientífica Alarmante: Preocupa su adhesión a ideologías contrarias al rigor científico, llegando al extremo de fijar una postura antivacunas al negarse a inmunizarse durante la pandemia de COVID-19.
• Proyecto de Trabajo “Carente de Sentido”: Su presentación ante la comunidad de la Facultad fue calificada como “totalmente carente de sentido, sin orden ni sustento”, evidenciando un “desconocimiento alarmante” del contexto actual de la educación y las ciencias de la salud.
La Deuda Política que Amenaza el Prestigio
La preocupación se centra en el marcado componente político de la designación. Arcila Novelo no oculta su naturaleza política y se jacta de que el Rector de la UADY le debía el cargo por haberlo ayudado a llegar a la Rectoria. Una muestra de esta influencia se vio cuando, siendo coordinador de Rehabilitación, se opuso “ferreamente” a la actualización del plan de estudios, y el Rector lo respaldó, perjudicando a futuras generaciones.
El nombramiento es visto como una negociación de “favores políticos”, donde el liderazgo del Rector eligió pagar lealtades antes que priorizar la excelencia académica.
Llamado Urgente a la Intervención
La llegada a la dirección de un individuo cuya visión se percibe como marcada por el elitismo y la anticiencia, y con tan poca conexión con el contexto actual de la salud, pone en grave riesgo el futuro de la institución de mayor prestigio de la UADY.
El nombramiento de Russell René Arcila Novelo no solo sella un rumbo cuestionable para la Facultad, sino que también pone en entredicho la credibilidad del juicio del Rector. Es urgente que las autoridades universitarias y competentes tomen cartas en el asunto, reevalúen la idoneidad del director designado y garanticen que la máxima casa de estudios esté liderada por la excelencia y el compromiso científico, y no por el resultado de negociaciones políticas. La calidad de la educación y la salud pública en Yucatán dependen de ello.
