Sergio Gómez Montero*
El hombre blanco no supo seguir la corriente de la anguila
(…) y atrapó en su ancha red de campos
al veloz pez de la nada
M. O’ Connor: “Poesía”
Sin duda, uno de los libros más polémicos pero trascendentes de la vida política en nuestro país es el de José Revueltas, El proletariado sin cabeza, cuyas ideas allí vertidas –más allá de las polémicas que originalmente desataron– siguen siendo de una trascendencia y vigencia indudables, más que nada porque aún hoy los grupos interesados en impulsar los intereses políticos de las clases históricamente opuestas al capitalismo entre nosotros, se debaten sin encontrarle la cuadratura al círculo, siendo ésta una tarea tan importante en momentos de transición entre capitalismo (en su cara horrible de neoliberalismo) y una máscara que aún no descubrimos qué esconde atrás: ¿populismo, revisionismo, una nueva vía anticapitalista, qué?
Lo que sí, y para eso sirve precisamente El proletariado sin cabeza y las pláticas que sostuvimos con Pepe Revueltas quienes tuvimos la suerte de hacerlo, que ese libro nos permite pensar a fondo, hoy, en uno de los problemas centrales que luego del estalinismo no han podido resolver quienes pacíficamente han impulsado la lucha política de aquellos grupos que, a nivel nacional, han buscado alcanzar el control social de sus países por la vía pacífica, para darle otro sentido a los ordenamientos sociales vinculados con el capitalismo, que desde principios del siglo XX –casi siempre con las armas en la mano, como recientemente en Bolivia– se niegan a admitir, en particular aquí en América Latina, que hay formas más humanas de organizar a nuestras sociedades.
Y ese sigue siendo, aún hoy, el que pareciera ser el problema central de nuestros pueblos, empeñados en vivir en mejores condiciones de vida: ¿cómo organizarse políticamente para darle la mayor efectividad posible a sus tareas de liberación? Al respecto, entre otras muchas lecturas, bien vale la pena leer lo siguiente de Ettiene Balibar: hay una primera manera de abordar esa temática a partir de la lectura de Marx y Engels, desde qué bases abordaron la temática de la construcción de la Liga de los Comunistas y de otras organizaciones prepartidarias de la época, hasta llegar, en un segundo momento de la temática a…: “Pero junto a ese discurso analítico y generalmente crítico, figura también al parecer un discurso normativo, sobre el deber ser: un discurso que enuncia, sobre la base de una teoría de las tendencias históricas a largo plazo, lo que debe ser el “partido proletario” para concordar con su concepto, es decir con su destino histórico: la conquista del poder político por el proletariado con vistas a la abolición de la explotación capitalista”. Debatirse en esos dos campos ha sido una de las grandes y polémicas tareas de los organizadores políticos del proletariado, quienes a veces con suerte y a veces sin ella han logrado darle sentido a las tareas de clase emprendidas por diferentes agrupaciones obreras y campesinas (particularmente).
Hoy, a pesar de los cambios registrados en el siglo XX hasta hoy por el capitalismo y la clase obrera, sigue vigente aún el por qué la organización política se mantiene como uno de los dilemas más complejos a los que tienen que hacer frente los agrupamientos sociales que dicen ¡Basta! de capitalismo.
*Profesor jubilado de la UPN
gomeboka@yahoo.com.mx
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