Rajak B. Kadjieff / Moscú, Rusia
*Sobre Coca Cola, la alianza estratégica con Pepsi Cola.
*Poderío de los deportes para crear “super personas”.
*El buen hábito de coleccionar medallas olímpicas.
Rusia, Estados Unidos, China, Japón, Alemania y algunas otras naciones avanzadas, conforman el grupo que aparentemente conduce los destinos del planeta y tiene, en su caso, el comando de los países poderosos de Europa.
Esto ocurre con dos conflictos bélicos de alto riesgo -en Ucrania y Medio Oriente-, sin que se vean contrincantes en otros continentes, con el privilegio de que posee características y curiosidades reveladas hasta el fin de la etapa histórica que inicio en el siglo XXI.
Para comenzar, la Federación Rusa es territorialmente mayor que Plutón y a partir del hecho de ser el mayor del mundo, sí es más grande que un planeta –o eso se creía que era– entero, en efecto, hasta ser uno de los países con la mayor venta de bebidas alcohólicas.
Así es Rusia, mucho después del Campeonato Mundial de Futbol que se desarrolló en sus tierras en 2018 y que la mostró como una nación acogedora y receptiva, aunque estresante y sólo para uno de los dos sexos
Una de las alertas que intentarán corregir los dirigentes máximos rusos al corto tiempo, es que a través de los estudios del Comité de Estadística, se pudo conocer que el número de hombres en el país europeo ha bajado de manera considerable.
En 2014 había más de 10.5 millones de mujeres más que hombres en el país, y se verificó la tasa de natalidad en base a los sexos y allí están parejas las estadísticas de bebés nacidos masculinos y femeninos.
Lo que finalmente se señaló como la causa de este desequilibrio entre sexos es que los hombres, ya en etapa adulta son más propensos a fallecer por estrés, abuso de alcohol y accidentes automovilísticos.
Por otra parte, el deporte no es únicamente un área en donde una persona se puede desarrollar, muchos países han tomado a éste como una herramienta para mostrar su poderío interno y la capacidad que tienen para crear “super personas”, por así llamarlo.
Rusia ha hecho un gran esfuerzo para formar y dominar el plano deportivo con grandes atletas como lo han sido las tenistas Anna Kournikova y María Sharapova, también el jugador de hockey Sergei Fedorov ganó protagonismo y la recordada atleta Yelena Isinbayeva, poseedora de varios récords mundiales.
Todos ellos han contribuido para que Rusia sea uno de los países que guardan el buen hábito de colecccionar más medallas de oro en Juegos Olímpicos, aunque hoy esté vetada para participar en ellos.
Aunque no sólo son los deportes más conocidos mundialmente y que más espectadores reúnen en un estadio y frente a un televisor es a los que apunta Rusia, sino que en los últimos años, en el país ha ganado fanatismo el Bodybuilding o Fisicoculturismo y el Powerlifting.
En esta práctica donde se demuestra el poder físico de una persona, Nadezhda Alexandrovna Yevstyukhina y Maryana Naumova han sabido destacarse por ser la ganadora de la medalla de oro con sólo diecisiete años y la campeona del mundo del Powerlifting más joven de la historia, respectivamente.
Existió un antes y un después en la empresa Pepsi desde que Rusia permitió que vasos con éste líquido y el nombre de la marca aparecieran durante la transmisión del debate entre el vicepresidente de Estados Unidos, Richard Nixon, y el presidente del Consejo de Ministros de la Unión Soviética, Nikita Khrushchev.
Hasta aquel año de 1959, Pepsi no había desembarcado de manera fuerte en el país de América del Norte y mucho menos se consumían refrescos de cola en el norte de Europa.
Luego de aquel episodio, Pepsi creció y en la actualidad es Rusia el segundo mercado para la empresa refresquera en el mundo, por encima de la Coca Cola y sus secretos guardados en Atlanta, Georgia, su sede mundial
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